Este domingo el dominical Punto Final develó un presunto caso relacionado con el tráfico ilícito de armas en la frontera entre Perú y Ecuador.
El programa de Punto Final reveló un informe periodístico donde los hermanos Kim y Keiko Ching Piña, gerentes de la armería Hunting son señalados de ser partícipes de una banda dedicada a la venta ilegal de armas a Ecuador.
Todo inició el pasado 7 de junio cuando un empleado de la armería mencionada fue detenido por la policía. Richard Martínez fue el colaborador de la compañía quien iba a trasladar 9 mil municiones sin autorización en su moto de carga. El armamento estaba cubierto bajo rollos de papel higiénico.
En aquella intervención, Martínez sostuvo que realizaba este movimiento por encargo de Keiko Ching Piña, para trasladar estas cargas hasta la frontera con el Ecuador. Asimismo, el armamento tenía como destino a ser entregado para alias ´Yaco´, quien según las indagaciones sería uno de los líderes de la organización criminal ´Los Lobos de Ecuador´.
En esa línea, en la intervención también estuvo presente Jessica Farias quien acompañaba a Martinez y respaldo esa versión. Por ello, se abrió una investigación para dar con el origen de esta acción, lo cual llevó a la policía hasta la armería Hunting, donde incautaron escopetas, cacerinas y gran cantidad de municiones que no contaban con la documentación correspondiente.
No obstante, la policía presentó más informes para continuar con las diligencias que corroboren estas versiones. Sin embargo, el fiscal Eidan Ulloa hizo caso omiso de las pruebas de la mencionada institución y en consecuencia, fue sancionado administrativamente por el Ministerio Público.
Los hermanos Ching Piña en sus declaraciones, negaron estas acusaciones y dicen ser ajeno a estos contextos. Por lo que han denunciado a los efectivos policiales quienes participaron en el allanamiento de sus recursos y señalaron que los informes de la cantidad de municiones incautadas no es cierto.
Informe: Carlos Prado