
El Ministerio de Cultura declaró a 50 bienes muebles, denominados tupus o prendedores, como Patrimonio Cultural de la Nación, en razón de su alto grado de valor, importancia y significado artístico, histórico y social dentro del patrimonio mueble peruano.
La norma destacó que los tupus, que datan de épocas prehispánicas, virreinales y republicanas, tienen una fuerte vinculación con el pasado y presente peruano, debido a que, en la actualidad, su uso se mantiene en algunas zonas geográficas de nuestro país.
El uso de estos accesorios de plata en prendas femeninas, servían, entre otras cosas, para destacarse por su alta calidad de manufactura en cuanto a su forma y diseño, por lo que su uso era exclusivo de las élites del pasado.
Además, sus representaciones iconográficas evidencian el resultado de una fusión entre dos culturas, donde se reflejan imágenes de carácter fantástico, como sirenas y centauros; y de animales locales, como venados y vizcachas.
De tal manera, es importante destacar la declaración de estos bienes materiales como Patrimonio Cultural, pues nos permite seguir conociendo las prácticas y acontecimientos más resaltantes de cada época de nuestro país.