Hace una semana, las autoridades mexicanas detuvieron al narcotraficante, alias “El Ratón”, en la ciudad de Culiacán y realizaron una rigurosa revisión de su casa. Se encontró a un alacrán, mascota de Ovidio, que era símbolo de los paquetes de drogas que circulaban en los Estados Unidos.
La policía revisó hasta el más mínimo espacio del domicilio para encontrar cualquier evidencia que permitiera iniciar un juicio, con evidencia sólida, en contra del hijo de Joaquín Archivaldo Guzmán Loera, alias “El Chapo”.
Al fondo de la casa, en una pecera astillada, se halló a un escorpión, el cual presuntamente el capo lo tenía como mascota.El pequeño animal confirmó a las autoridades quién era el responsable de los envíos de drogas que los fiscales de California no podían descifrar.
Años atrás, la agencia antidrogas estadounidense (DEA, por sus siglas en inglés) intervino a una red de traficantes que transportaban enervantes desde el Golfo de México hasta la bahía de San Francisco. En sus envolturas se graficaba un escorpión a blanco y negro de con la cola levantada en señal de ataque.
Según el periodista de investigación Óscar Balderas, aquel arácnido ‘no solo resultó ser la mascota de Ovidio Guzmán, sino la pista que confirmó una investigación de autoridades estadounidenses iniciada desde hace tiempo’.
