El pasado martes 28 de mayo, la Junta Nacional de Justicia publicó la resolución que formaliza la destitución de la exfiscal de la Nación, Patricia Benavides, y su hermana, la jueza Enma Benavides, debido a graves irregularidades durante sus funciones. Además de ello, el dictamen conlleva la inscripción de ambas hermanas dentro del Registro Nacional de Sanciones contra Servidores Civiles, dirigido por la Autoridad Nacional del Servicio Civil.

La destitución de la exfuncionaria del Estado, Patricia Benavides fue determinada por la Junta Nacional de Justicia tras evidenciarse que había intervenido en una investigación, que se llevaba en contra de su hermana, al suspender a la fiscal Bersabeth Revilla, presentando un informe de baja productividad como excusa. 

La ponencia, presentada por la miembro titular María Zavala, reveló que la fiscal Revilla tenía un 90% de productividad, lo que contradecía el informe presentado por la fiscal suprema Azucena Solari, quien también fue suspendida por severas faltas.

Patricia y Emma Benavides podrían requerir una apelación de reconsideración, aunque esto no suspendería la sanción ya tomada por el ente jurídico. Juan Peña, abogado de Patricia Benavides, afirmó que se formulará una revisión ante la Junta Nacional de Justicia y un recurso ante el Poder Judicial.

Además, la exmagistrada, Patricia Benavides, enfrenta otra investigación por el presunto tráfico de influencias agravado y patrocinio ilegal, esto relacionado con su obtención de una plaza como fiscal suprema en el mes de mayo, en el año 2022. 

La destitución de Patricia y Enma Benavides marca un hito en la lucha contra la corrupción en el Poder Judicial, subrayando la importancia de mantener la independencia y transparencia en las instituciones. Sin embargo, las acciones legales pendientes y los recursos de reconsideración presentados indican que este caso aún tendrá desarrollos significativos en el futuro cercano.

Redacción: Diego Chirinos