960 alumnos quienes integran a la Institución Educativa Nuestra Señora de Fátima perteneciente a la ciudad de Chiclayo en Lambayeque, realizan sus actividades estudiantiles en condiciones que no son las mejores para llevar a cabo sus clases presenciales. Así lo informó el director del colegio Teófilo Ipanaqué.
A partir del 2 de mayo los alumnos tuvieron que dejar su antiguo centro de estudios que actualmente atraviesa una etapa de reconstrucción y mudarse a unos módulos instalados del colegio San José en Chiclayo, donde el ambiente de trabajo no es el adecuado. Asimismo,ha pasado más de una semana desde el cambio, los docentes están preocupados por la integridad de sus estudiantes.
Estos módulos en los que están ubicados los 960 alumnos, se encuentran en medio de tierra y piedras. Cuando es turno de realizar sus actividades físicas, se ven obligados a hacerlo dentro de estos espacios reducidos al no contar con un patio. Si bien, el sitio si cuenta con agua potable, también tiene la contraparte de no contar con un suministro de energía eléctrica, lo que imposibilita desarrollar sus cursos de computación e informática.
La institución educativa había solicitado un pedido formal al Gobierno Regional de Lambayeque para mejorar las condiciones del recinto actual. Sin embargo, no obtienen respuesta mientras que los alumnos seguirán desarrollando sus actividades escolares hasta agosto que es cuando se tiene previsto contar con su nueva sede educativa.
Redacción: Carlos Prado
