Composición SRRTV, Otilia Barreto.

En medio de la conmemoración del 145° aniversario del Combate de Angamos, realizado en la plaza Grau el último martes, la presidenta de la república Dina Boluarte encaró a la prensa y medios que son críticos a su gobierno, haciendo uso del término “terrorismo de imagen”. En esta ocasión, la mandataria refirió a que se vienen creando noticias falsas que se apoyan en las redes con el fin de crear inestabilidad, y un escenario favorable para obstaculizar el crecimiento de la economía.

Al respecto se manifestó el Consejo de la Prensa Peruana (CPP) y la Asociación Nacional de Periodistas del Perú (ANP) a un medio intenarcional, expresando que dicha declaración no solo es peligrosa, pues el Gobierno ha calificado de mentira situaciones que incluso han sido registradas, sino que podría ser una estrategia presidencial con la que se buscaría criminalizar el ejercicio periodístico. Según lo indica Zuliana Lainez, presidenta de la ANP, lo expuesto por la mandataria es un llamado abierto a la confrontación con aquellos medios y periodistas que hacen su trabajo.

Asimismo, Rodrigo Salazar, el director del CPP, señaló que estas declaraciones abren una discusión que puede terminar en extremos, como ha ocurrido en las dictaduras de la región, donde se ha manipulado el concepto de noticias falsas con el objetivo de perseguir a la oposición. Ello con referencia a las expresiones tanto de sus voceros como de la misma Dina Boluarte al declarar de falsos hechos corroborados como: el descontento hacia Dina Boluarte en Piura, la recesión económica, que el Perú no sea el segundo país más seguro de la región, o que los Rolex de la presidenta no eran de antaño, entre otros muchos. 

En su discurso, donde enalteció los logros de su gobierno, la presienta aseguró que estas opiniones contra su gestión, a las que señala como Fake news, son un método aplicado por los totalitarios con su lema: miente, miente que algo queda. Sobre ello el analista político José Carlos Requena aseguró a un medio local hay muchas cosas que llaman la atención en su gobierno y que efectivamente merecen una crítica justificada por parte de distintos actores del debate político, pero, según asegura el especialista, hablar de terrorismo de imagen muestra una reticencia a la crítica muy preocupante porque precisamente el no estar abierto a las críticas es más bien propio de un Estado totalitario.

Lo cierto es que van más de 90 días que la mandataria Boluarte no da la cara a la prensa, para poder responder sobre los problemas coyunturales que se viene enfrentado, como son los paros,  la ola de extorsiones a varios sectores, el gasto de más de 3 500 millones de dólares en aviones de guerra, la crisis medioambiental como resultado de los incendios forestales, además de las investigaciones fiscales que le vienen siguiendo tanto a ella como a varios ministros, congresistas y demás funcionarios de su gestión, incluyendo a las personas más allegadas a su entorno.

Redacción: Otilia Barreto