
22.700 muertos se han registrado tras el terremoto ocurrido el lunes en Turquía y Siria, mientras que cerca de 80.000 personas han resultado heridas, así lo confirmaron esta mañana las autoridades en Turquía y el grupo rescatista de los Cascos Blancos.
Por el lado de Turquía, se reportaron al menos 8.991 muertos y otros 75.523 resultaron heridos, según informó el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan. Mientras que por Siria, al menos 3.384 personas perdieron la vida y 5.245 resultaron heridas entre las áreas controladas por el Gobierno y las áreas controladas por los rebeldes.
Según la OMS, los sobrevivientes podrían enfrentar un desastre secundario, ya que el frío, sumado a que muchos de ellos no tienen donde hospedarse, empeoran su condición. Además, prevén que enfermedades como el cólera puedan causar más daños que incluso el mismo terremoto.
La postura en la que el sobreviviente se encuentra tras el desplome, el acceso a aire y agua, el clima, las condiciones meteorológicas y el estado físico de la persona atrapada influyen en cuánto pueden seguir con vida hasta antes de ser rescatadas.
Aunque la mayor cantidad de rescates se da entre las 24 primeras horas, existen antecedentes donde el cuerpo humano ha soportado incluso más de una semana. En el 2013, una mujer fue rescatada luego de 17 días tras el traslado de una fábrica en Bangladesh.