El líder supremo de Irán, Alí Jamanei, ha instado a que los tribunales emitan condenas de muerte contra el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, y otros líderes israelíes. Según Jamenei, los actos del Ejército israelí en Gaza y Líbano no son victorias, sino graves crímenes de guerra. Esta declaración se da tras las órdenes de arresto emitidas por el Tribunal Penal Internacional contra Netanyahu y su exministro de Defensa Yoav Gallant por las ofensivas en Gaza y Líbano.

En un discurso dirigido a la fuerza de voluntarios Basij, Jamenei calificó estas órdenes de arresto como insuficientes, exigiendo medidas más drásticas. Por su parte, el jefe de la Guardia Revolucionaria iraní, Hosein Salami, afirmo que las ordenes reflejan la muerte política de Israel, destacando que el mundo está comenzando a rechazar al régimen sionista. Estas tensiones surgen mientras la situación en la región continúa agravándose por los enfrentamientos en Gaza y Cisjordania.

Al mismo tiempo, dentro del gobierno israelí hay desacuerdos sobre la estrategia militar. El ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, ha rechazado tajantemente un alto el fuego con Líbano, calificándolo como un error estratégico. Según Ben Gvir, detener las operaciones ahora impedirá la eliminación definitiva de Hezbolá. Sus declaraciones refuerzan su postura de no ceder ante la presión internacional, amenazado incluso con retirar su apoyo al gobierno si Netanyahu acepta una tregua. 

En medio de este panorama, el enviado de Estados Unidos a Oriente Próximo, Amos Hochstein, ha tratado de mediar ante Israel y Líbano para lograr un alto el fuego. Sin embargo, los enfrentamientos no cesan, especialmente tras los ataques de Hezbolá en octubre del 2023 y la posterior ofensiva israelí. Hasta la fecha, el conflicto ha dejado miles de víctimas en Gaza y Cisjordania, aumentando la incertidumbre sobre el futuro de la región.

Redaccion: Zully Cjuro