
Una nueva ola de violencia emerge en Manipur. El pasado martes 26, se llevaron a cabo nuevas protestas lideradas por estudiantes quienes mostraron su indignación. Estas movilizaciones se produjeron luego de una publicación en redes sociales de una imagen que mostraba los cuerpos sin vida de dos estudiantes de la etnia meitei a manos de desconocidos.
El conflicto que divide a la región desde el mes de mayo opone principalmente a las etnias meitei, principalmente hindú contra otras etnias minoritarias de la región, principalmente los kukis, de creencia cristiana. Al menos 175 personas han muerto desde entonces y las autoridades se muestran ineficientes para terminar con las hostilidades.
El conflicto se desencadenó el 3 de mayo cuando un grupo de jóvenes pertenecientes a la minoría kuki protestó en contra de la solicitud de un tribunal para clasificar a la mayoría meitei como ‘tribal’, lo que les otorgaría la capacidad de reclamar territorios en las zonas montañosas ocupadas por los kukis y acceder a cargos gubernamentales.
La ciudad de Churachandpur, predominantemente habitada por la comunidad kuki, fue el epicentro inicial de los actos de violencia, antes de que los disturbios se propagaron a otras regiones. Las tribus kukis expresan su preocupación por el posible despojo de empleos y tierras ancestrales por parte de los meiteis.
Redacción: Ricardo Carnica
