Las protestas, reactivadas el pasado 4 de enero, dejaron 17 muertos en una jornada violenta en Juliaca, Puno. Al realizar necropsias en los fallecidos en esta región el instituto de Medicina Legal del Ministerio Público reportó el hallazgo de proyectiles de armas de fuego alojados en los cuerpos de 9 de las 17 víctimas.
De acuerdo con la información de los protocolos de necropsia elaborados por los especialistas del IML con la finalidad de esclarecer los homicidios, en seis cuerpos se encontraron fragmentos de proyectiles de fusil de 7.62 mm. que correspondían a los fusiles AKM, en dos había restos de perdigones de metal y en uno lo que sería una bala de pistola.
Las 9 personas fallecidas a causa de estos disparos, son: Edgar Huarancca (22), Ghiovanny Illanes (18), Reynaldo Ilaquita (18), Elmer Leonardo (16), Paul Mamani (18) y Eberth Mamani (40) todos ellos a causa de los proyectiles de 7.62 mm. Tanto Elmer Leonardo y Eberth Mamani recibieron los impactos de balas en la cabeza. Mientras Reynaldo Ilaquita recibió el impacto en el tórax.
A esto se le suma Gabriel López (35) y Marco Samillán (30) que fallecieron por impactos de perdigones metálicos en el pecho. También, Jhamileth Aroquipa que desafortunadamente la causa de su muerte fue por impacto de bala en el estómago por una pistola.
Fuentes consultadas por La República, indicaron que los otros cuerpos en que no se encontró restos de proyectiles fueron, porque los disparos fueron a corta distancia. Además, las armas empleadas parecen ser de AKM y pistolas pertenecientes a la Policía Nacional del Perú y no de las Fuerzas Armadas.